lunes, 6 de enero de 2014

Algunos defectos

Tengo que deponer y posponer mi lucha conmigo mismo,..
ya habrá tiempo de poderme reencontrar, ahora, mañana,.., o después de,..

El universo no detiene su marcha,..
y yo quisiera bajarme de él en un momento,..
para poder observar con mucho detenimiento,..
las imágenes, las figuras,.., los cuerpos,.., las declinaciones,..
a los ojos,.., los cuerpos como se mecen,.., como se requiebran
las figuras, como danzan,…, como el cuerpo habla todo el tiempo,..
esa sonrisa,.., ese gesto,.., ese encuentro que parece casual y no,.., no lo es,..
la maquinación de buscar el momento,..
de ver ese juego,.., del gato y del ratón,..
del cazador y la liebre,..
ese sentimiento depredador que parece que priva en todos,..
alguien dirá así son “los juegos de los humanos”,.., pues si,..
el ser humano es lúdico,.., siempre está en ello,..
apostando,.., sopesando las probabilidades de los eventos,..
ejerciendo dominio, soltando,.., arredrando,.., atemorizando,..
midiendo alcances,.., hasta aquí,.., no mas,.., mas,.., ya, ya,..
¿podré un poco más?,.., probaré,..
delimitando el espacio de su influencia y su poder,..
o al menos ejercer la burla, la ironía,.., o ya finalmente,..
la indiferencia,…
decir: no me merecía ninguna lucha,.., ¡va!,.., pa´lante, pa´lante,..
todos los defectos vaya que se ejercen,..
son nuestro mejor elemento de conquista,..
son nuestra medida de solaz,.., esparcimiento,.., gusto y placer,..

La vanidad, esa que busco de continuo,..
la requiero,…, la ocupo,..
¿soy?,.., ¿qué soy?,..
los que los demás me digan que soy,..
guapo, inteligente, sagaz, astuto,.., extremo,…
pasional o loco al menos,..
dependo febrilmente de esa opinión,..
como el aire que respiro,..
la requiero para poder vibrar y tremolar,..

La soberbia,..
esa siempre me protege,..
siempre me cobija,..
“tu vales”,.., nadie te diga lo contrario,..
vales y vales mucho,.., un montón,…
no es necesario que nadie me lo diga,..
la llevo plegada en mi,…, adherida,..
en mi más profundo sentimiento,..
mi esencia,..
me siento muy superior,..
pero nunca lo digo,..
tan solo transijo,.. , y hasta declino,..
tan solo sonrió (no en carcajadas abiertas),..
sino bien ocultas muy dentro mío,..

La pereza,…
uno de mis pecados predilectos,..
que acaricio bien frecuentemente,..
el mundo ocupara de mil manos,..
yo digo,.., no las mías,..
que no me saquen de mi espacio de confort,..
¿cómo se atreven?,..
déjenme aquí bellamente dormido y acostado (depresión),..
alguien me decía:
“a comer, luego llegaba, y preguntaba: ¿ya te ganaste ese bocado?”,…
pobre de mí, que me tenía que verme sometido por dicha pregunta,.., jajaja,..

Para muestra, por lo pronto, basta un botón,.., ya seguiré más delante
con los otros tan hermosos:
la gula, la lujuria, la ira, y la preciosa envidia,..