¿Cómo hacer para
abandonar esos recuerdos,
esos lunares del
alma?,..
Que nos postran,
que nos marcan,…
Después de tantas
veces que lo he hecho,
no logro
acostumbrarme,..
Partir, sin saber
lo que vendrá,..
Suspirar,..,
aunque no mires atrás,..
Sabes
perfectamente el panorama,…
lo reconoces
fielmente,…
el horizonte,..,
los recuerdos,..
las personas,..
sus miradas,…, sus
rostros,..
sus palabras,…
Por ello digo
que,..
Somos como barcos
a la deriva,…
dejando tan sólo
estelas nada más,..
Hasta con los
hijos,..
Sólo eso somos, en
verdad,…
Pudiera quedarme
quieto,…
no moverme,…
implantarme como
un musgo,..
adherirme,…
no soltar,…
Sin embargo,..
De esta asfixia,
nada bueno resultará,..
Las personas,
transitamos,…
nos tocamos,
suspiramos,..
un momento nada
más,…
¿Y si no?, luego
viene el tedio,..
la rutina,..,
nuestra altura,..
¿alguien lo podrá
soportar?,..
He allí,…
la pregunta,…
yo, no sé qué
contestar,…
