Si y mucho,…, demasiado coraje hay que tener,..
para poder rebasar nuestras propias fronteras,..
a nuestro temor,..
Esa inseguridad que puede enquistarse en el corazón,..
ese discurso que nos dice constante,..
habrás de fallar,.., no te mereces la felicidad,.., es un don
que no te corresponde poseer,…
renuncia,.., tu no lo puedes lograr,.., no te lo mereces,..
no lo has devengado,..
Y por el contrario te mereces que te vaya terriblemente mal,..
por infinidad de argumentos y razones que damos cabida,..
Soy un pecador,…, he fallado tantas veces,..
he mentido,.., he utilizado lo que no debía,.., usurpe,.., me vendí,..
y engañe,..
No me merezco el bien que la vida me pueda ofrecer,..
Y allí hay un gran error de perspectiva,…
nadie en el mundo es perfecto,…, ni nunca,..
lo llegaremos a ser,…
la condición inherente del ser humano es la imperfección,..
humana es,…
El amor,.., es la sapiencia y consciencia de ello,..
y su perdón,.., su aceptación,..
lo cual no implica el cinismo, “soy así y que”,..
es solo la aceptación plena de nuestra “falla interna” de “origen”,..
para ser amables con nuestros errores,.., equivocaciones,..
reconocerles sumisamente y adelantar,.., adelantar,..
se necesita,.., se requiere,.., la vida es eso,.., es caminar y
adelantar,..
Todo ser humano se merece una “n” esima oportunidad,…
¿hasta donde?,.., todo el tiempo de vida,…
Si Dios no las concede,.., es una tacita oportunidad que debemos de tomar,..
con valor,.., con empuje,.., con perdón,.., con fe y con mucho amor,..
