domingo, 30 de noviembre de 2014

Es la historia,..

¿Cuan amable puede ser el tiempo?,..
y la historia,.., los años idos,..
vividos o apoltronados,..

Dejar tocarnos por el suave viento del aire fresco,..
ya en el rostro, en el alma,..
o un fuerte vendaval que nos arrase,..
que nos decante como piedra en brioso río,..

Son cuestiones que no resolvemos,..
tan sólo estas se dan,..
acaecen,..

En verdad que sólo somos,..
pequeñas máculas en este vasto universo,..
motas mínimas,..
pero significamos,..
tanto, tanto,..
para un solo ser al menos,..
nosotros,..
y alguien más,..

Nuestro origen,..
los ascendientes o la prole,..
fuimos el medio de su presencia en este mundo,..

Vayamos despacio, tranquilo, tranquilo,..
en un segundo,..
podemos cometer un acto de locura,..
o tocar muy suavemente la cordura, la razón,..
el amor sublime que se desparrama en gajos,..
en pequeños trozos de sabor y de dulzura,..

Abrazar a un pequeño ser necesitado,..
de aliento, de amor, de comprensión y conjugado,..

Hay amor como se siente el enorme espacio del vacío,..
claro que no soy de piedra,..
soy tan sólo un mínimo ser y no de roca,..

El talento, las virtudes, los defectos,..
mis sentires,..
me conforman,..

Caminaré despacio hacia el fin de las auroras,..
mas estos introyectos, estas diatribas,..
ya emergieron,..
se desparraman, contra el viento,..

Mi voluntad se ha quebrantado,..
y que bueno,..
darme cuenta de lo débil,..
la argumentación tan delicada y poco plausible,..
atorrante,..

Asimilarme, adosarme ya por fin,..
hacia el vaivén ya de la vida,..
como una leve hoja,..