martes, 28 de junio de 2016

¿Qué es un amigo?,.. (para mi)

Alguien que no conozco,..

Podría decir que de ello tengo absoluta culpa,..
pues,.., exijo demasiado,.., voy al límite,..

Considero que un amigo,..
no es aquel que pretenda “salvarme”,..
cambiarme o modificarme mi estructura,..
contrahecha,.., incierta,.., débil,..

Alguien con quien pudiera diferir abiertamente,..
sin enojos,.., retóricamente,..

Y sin absolutos,.., con superioridades o anatemas,..
milagros o semejantes,..

Que pudiera ver más allá de mis palabras,..
de mis silencios,.., contrariedades,..
que no me avergüence con su divina vida,..

Que desde mi impronta y jerga mal hecha, aplicada y dicha,..
que me intuya,.., que no me deduzca,..

Que no tenga que explicarle todo lo que piense y sienta,..
que no me disculpe,.., porque yo lo busque,.., lo requiera,..
o porque así lo considere para proseguir y continuar,..

Saberlo, ambos,.., que no debe estar pegado a mí,..
en todo el tiempo,.., no soy un llavero,..
y que empatamos siempre,..
esto es ilógico,.., demasiado iluso,..

Que no soy su comparsa y el tampoco mío,..
no somos cómplices,.., buenos, malos,..
del club de Tobi,..

Que yo podría algo aprender de él (o ella),..
y el (o ella) de mi,..

Que la distancia, las formas, el tiempo,..
la vida,..
no son un requisito,..
para sabernos amigos,..

Es pues por ello,..
esta soledad que yo resuelvo,..
y continuo,..


La vida,..

La vida está hecha de lugares,..
de recuerdos,..
de momentos,.., que atesoramos,..

De personas que queremos y que no,..

Todo tiene un valor,.., un peso especifico,..
en nuestra alma,..
vale más,.., o vale menos,..
según nuestra inclinación,..
o nuestros apegos o miedos,..

No debería importar tanto el boato, lo superfluo,..
pues este por lo regular es efímero,..
o pasajero,…, o se corrompe,..

La piel joven pierde su lozanía,..
los brillantes ojos se apagan,..
y la palabra sabia, docta,.., puede extraviarse,..

El éxito es tan frugal,
es una euforia pasajera,..
que puede también lastimarnos,..
con el creer que debe siempre estar,..
y continuar,..
nos expolia,.., nos exige,..
y puede traicionarnos,..


Anagrama,..

Hacia atrás podemos percibir,..
(al recordar con fidelidad),..

Que muchos de los pasajes que vivimos,..
al parecer inocuos, insalobres,…, cotidianos,..

Se extradimensionaron
con el paso tranquilo del tiempo,..

Yo estuve allí,..
yo vivi allí,..
yo hacia,..
yo quería,..

Realmente se transforman,..
los recuerdos logran tener,..
una identidad muy propia,..
como ajena,..

Y nos vemos como espectadores
alejados de estos hechos que pasaron,..

¡Bendita vida!,..
¡hermosa vida y consciencia!,..


¿Vale la esperanza?,..

En un mundo convulso,
tan lleno de pecado, dolor y muerte,..
reales,..
no supuestos, teóricos, que según,
no debieran considerarse,..

Por no “afectar”, nuestra “sensibilidad”,..
nuestra ceguera,..

¿Cuánto puede valer una esperanza?,..
la palabra muda,.., la diatriba, el enojo,..
el verso no dicho,.., contenido,..
la voz que no canta,.., que se queda apagada,..

El dolor que no logra trascender,
que se enquista,..

La alegoría de la palabra, contra la nítida verdad,..

Un beso, un abrazo,.., un quizás,..
una lagrima bendita,.., no vertida,..
un saludo sincero,..

Un amor,.., por más mínimo que fuera,..

¿Vale más el fino aroma de la alpargatería,..
un buen vino,..
una portentosa mujer,.., o,..
una mentira?,..

La palabra consonante o aquella que no cante,..
pero que se adueña de la ínclita verdad no sostenida,..
y de la justicia defensora,..

¿Qué vale más?,..