miércoles, 13 de diciembre de 2017

Mi cuerpo,..

Esta mi alma, mi ser,.., en este cuerpo,..
y viaja con él y en él,..
percibe sensaciones,.., escucha ruidos,..

Pudiera tender sus manos, para algo sostener,..
una petición,.., un saludo,.., una bendición,..
algo hacer,.., manufacturar,..
o tan solo acariciar,..
o trémulas pedir,.., ¡parad!,.., ¡no,.., no lo hagáis!,..

Igual conlleva un corazón que bondadoso,..
puede solicitar más, un poco más de amor,..
o dar,.., calor,..
bondad,.., abrigo,.., saciar la sed de un sediento,..

Parecieran dos dimensiones tan distintas,..
totalmente asimétricas,..
la realidad soterrada,..
el espacio que recorro, que tránsito,..

Tierra,…, polvo gris,.., cielo borroso,..
rostros impávidos e indiferentes,..
inocuos rostros y palabras silenciadas,..

Y esta luz que ella deviene,..
no sé de donde,..

Y solo logro considerar a mi alma,.., a mi ser,..
esa luz inextinguible que me remite a las estrellas lejanas,.., lejanas,..
viajantes,.., de infinidad de colores,…, pulsantes,..
que recorren todo el espectro,..
energía lumínica, que percibo (?),..

Y esa duda,.., que está allí,.., es mi límite,..
de humanidad procaz que me aterriza,..

Saberme finito,.., extinguible,.., como una pavesa,..
apenas una mota luminosa,.., pequeña,.., muy pequeñita,..
pero quizás,.., en un instante infinitisimal,..
coincidió con las estrellas rutilantes,.., hermosas,..
gracias,..
que así sea,..


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